“Soy Carla Martis Vargas, terapeuta de masaje licenciada y coach holístico certificado, y mi negocio es BODHI”

Vía Empresarial

Empresaria: Carla Martis Vargas

Empresa: Bodhi

Una verdadera metamorfosis profesional, física y espiritual

Todos vivimos experiencias dolorosas que nos llevan a tomar decisiones que cambian nuestras vidas. Soy Carla Martis Vargas, terapeuta de masaje licenciada y coach holístico certificado. Las decisiones transformadoras que yo tomé me llevaron a EMPRENDER. Mi negocio es BODHI, un centro de masaje terapéutico clínico en Toa Baja en el que trabajamos para que nuestros clientes puedan alcanzar el bienestar en cuerpo, mente y espíritu.

En BODHI trabajamos el masaje en diferentes modalidades, según las necesidades de cada persona y añadimos técnicas de sanación como el Reiki y la cristaloterapia para ayudar con la conexión personal y potenciar la sanación integral. Nuestra filosofía es que no hay por qué vivir con dolor, por lo que compartimos herramientas para aliviar el dolor en todas sus expresiones. Esta ha sido la gran lección que yo tuve después de muchos años de sanación, desarrollo personal y profesional.

“Los obstáculos han sido muchos, pero en todo momento tuve la seguridad de que podría lograrlo, porque me sentí acompañada por todos aquellos que me brindaron apoyo…”

Transformando lo negativo en vibras positivas

Hace 11 años, en el momento más oscuro de mi vida, estudié masaje terapéutico. Vivía en una relación de maltrato en todas sus formas. Salir de esa relación fue sumamente difícil. Sin embargo, eso no fue todo, echar hacia adelante sola con 3 niños, ha sido la cosa más difícil que haya hecho en la vida.

Estuve varios años dando clases como profesora, pero tenía muchas limitaciones como madre soltera para poder brindar más cursos y tener más ingresos. Amaba mi trabajo, pero me perdía con frecuencia los momentos importantes de mis hijos porque tenía que trabajar y eso me frustraba muchísimo.

En enero de 2018, luego del huracán María, perdí mi trabajo como profesora y me quedé sin ningún ingreso; y fue en ese momento en el que el Centro para Puerto Rico apareció en mi vida, para mostrarme que mi sueño de montar mi propio negocio no era descabellado y que había personas que me ayudarían a alcanzarlo. Tuve muchas dificultades de salud, que se unieron al sinfín de retos que trae consigo emprender como madre soltera. Definitivamente, no es tarea fácil.

La aventura a penas está comenzando…

Mientras me preparaba, descubrí que aquella relación maltratante me había dejado huellas emocionales que afectaron mucho mi confianza. Sin embargo, aun con todos mis dolores y mis grandes temores, en otoño de 2019 decidí emprender. ¡Y adivinen qué! En marzo nos llegó la pandemia y tuve que cerrar mi negocio por varios meses.

Los obstáculos han sido muchos, pero en todo momento tuve la seguridad de que podría lograrlo, porque me sentí acompañada por todos aquellos que me brindaron apoyo a través de llamadas, proyectos, talleres e incentivos monetarios para el desarrollo empresarial. Mi familia y mis amigos; mis clientes que ya son la familia de BODHI. Todos me han devuelto la confianza para compartir los dones de mis manos y ayudar a otros de la misma forma en que me han ayudado a mí.

EMPRENDER ha sido mi mejor aventura, porque ahora vivo mi sueño, me vivo a mis hijos y me permite seguir desarrollándome en muchos aspectos de mi vida. Gracias a esta aventura cada día soy una mujer un poco más feliz.

 

Vía Empresarial es una iniciativa de metropistas en colaboración con el Centro para Puerto Rico de la Fundación Sila M. Calderón